jueves, 2 de mayo de 2013


LA  DOLORES
EN EL PRINCIPADO DE ASTURIAS


            La Dolores, nuevamente de actualidad. En esta ocasión, viaja a Asturias, donde en su capital, Oviedo, se presentará de gala, en el fastuoso marco del Teatro Campoamor, los días 30 y 31 de mayo y el 1 y 2 de Junio.
            A estas representaciones se les quiere dar la mayor solemnidad. A tal fin, en la Sala de Exposiciones del Teatro Campoamor, se ofrecerá al público una amplia muestra de documentos, fotografías, láminas, carteles y libros sobre “La Dolores”. Asistirán a la representación inaugural destacadas personalidades de la cultura y de la política de Aragón, entre ellas, el Consejero de Cultura del Gobierno de la Comunidad Aragonesa, Javier Callizo, y el alcalde de Calatayud, Fernando Martín.
            El día 29, a las ocho de la tarde, en la Sala de Conferencias del Teatro Campoamor, el escritor e investigador Antonio Sánchez Portero, disertará sobre la Dolores en la ópera, la literatura y la música, y, especialmente, sobre la ópera de Bretón que se representa.
            Para dar vida a esta ópera se cuenta con dos elencos de primerísimas figuras:
            En el papel de DOLORES, actuarán las sopranos Teresa Novoa y Laly Chilaia. En el de MELCHOR, los barítonos Rodrigo Esteves y Federico Gallar; y en el de LÁZARO, los tenores Javier Palacios y Manuel Beltrán. PATRICIO será interpretado por los barítonos Marco Moncloa y Harol Torres; y el sargento ROJAS por los también barítonos Ángel Rodríguez y Abelardo Cárdenas. CELEMÍN será escenificado por los tenores Ricardo Muñiz y Francisco J. Sánchez; y la figura de GASPARA la asumirá Silvia Leivinson.
            Participan de forma destacada en este acontecimiento el Grupo Folklórico “Solera de Aragón”, dirigido por Mariano Arregui. El director de orquesta es el maestro Argentino Tulio Gagliardo; el autor de los decorados y director de escena, Julián Molina. La producción escénica corre a cargo de Verdi Concert, cuyo director es Francisco Alonso Resalt.
            Gracias a Francisco Alonso, casado con la bilbilitana Maribel Rodríguez, ha sido posible que la magnífica ópera de Bretón, y con ella el nombre de Calatayud, se pasee en triunfo por diversos puntos de España. Ha estado en Jerez de la Frontera, en Santander, en Málaga. Ahora, en Oviedo. La asignatura pendiente es Aragón, Zaragoza, la patria de la Dolores. ¿Para cuando?
            La próxima cita, si es que no surge otra, lo que es muy posible, será en el Teatro Real, como quien dice, a la vuelta de la esquina, en la próxima temporada del 2004. Los preparativos para este magno acontecimiento, ya están en marcha. La última vez que se representó “La Dolores” en el Real de Madrid fue en mayo de 1925.                                                                                  Equipo de Redacción

Antonio Sánchez Portero
Tfono.: 976888017
Móvil:  654226938
Calatayud, 21 de mayo de 2002
           
         El PERIÓDICO DE GIJÓN                                          Sr. Director.
                                                                                              D.Rodrigo Cepeda
           
            Estimado amigo: Con motivo de la representación de la ópera La Dolores, de Bretón, en el Teatro Campoamor, los días 30 y 31 de mayo y 1 y 2 de junio, el día 29, a las 8 de la tarde, en la Sala de Conferencias de dicho teatro, disertaré sobre la Dolores en la ópera, en la literatura y, especialmente, sobre la ópera de Bretón que se representa.
            También, en la Sala de Exposiciones del Teatro Campoamor, se ofrecerá al público una amplia muestra de documentos, fotografías, láminas, carteles y libros sobre “La Dolores”, personaje que ha generado un patrimonio cultural que no tiene parangón en la Literatura y en la Música universales. Os envío para vuestro conocimiento y archivo, algunos recortes, folletos y un periódico que se editó el día de la inauguración de la restauración del Mesón de la Dolores.
            Doy mi autorización para, si lo estimas oportuno, podáis usar a vuestra conveniencia toda esta información, en su mayoría generada por mí.
            El día 28 tengo previsto desplazarme a Oviedo y con mucho gusto me pondré en contacto con vosotros por si creeis necesario ampliar la información que ahora os facilito.

                              Un cordial abrazo
                                                            Fdo.: Antonio Sánchez Portero


CONFERENCIA  Y  EXPOSICIÓN  SOBRE
LA  DOLORES  EN EL  CAMPOAMOR

            Como por un lado los lectores de La Comarca deben conocer la noticia y, por otro, no me agrada hablar de mí mismo, porque si me quedo corto, mal, y si me paso, peor: recurro a transcribir algunos párrafos de las crónicas publicadas en La Nueva España, de Oviedo, no sin antes resaltar que la Dolores ha brillado con luz propia en uno de los mejores lugares posibles: en el Campoamor, en el Salón de Té, presidido por el busto del Príncipe Felipe.

Sánchez Portero califica a la Dolores
“de leyenda de ámbito universal”
            A lo largo de años y años de investigación ha reunido información sobre todas las creaciones artísticas dedicadas a este personaje histórico, sobre el que, en palabras de Sánchez Portero, se ha construido “una leyenda de ámbito universal”. Ayer, en el salón de té del teatro Campoamor, y como prólogo a la representación de la ópera hoy en Oviedo, pronunció una conferencia en la que expresó algunas de las conclusiones de sus estudios.
            Para dar fe de la popularidad de este personaje, refirió un caso que le contaron hace mes y medio en Castellón. Una médica nacida en Calatayud le comentó que, durante una visita a Japón, uno de sus colegas nipones identificó esta ciudad aragonesa por la Dolores y le explicó que sólo conocía dos ciudades españolas: ésta, por la copla y Barcelona por las Olimpiadas. “En Internet se puede comprobar que desde los sitios más dispares visitan las buenas páginas dedicadas a la Dolores”, señaló Antonio Sánchez Portero.
            El investigador, que dirige el museo dedicado a esta mujer en Calatayud, insistió en la “cantidad, variedad y calidad de las obras de diversos tipos que ha generado la Dolores”, hecho al que se refirió como a “un caso único”. “En mis dos últimos libros aparece un centenar de títulos”
            Dolores Peinador Narvión es el nombre de la inspiradora de todas estas obras, según Sánchez Portero. Era —expuso el historiador— una mujer de belleza excepcional, que heredó una gran fortuna, contrajo matrimonio en secreto y fue madre de seis niños. “Tuvo una vida apasionada y apasionante”, comentó el conferenciante, y añadió que por eso la maledicencia popular hizo circular a mediados del siglo XIX la famosa copla. Dolores y su familia se mudaron a Madrid, huyendo de la ruina y de los comentarios, y en esta ciudad, en el palacio de los marqueses de Altamira, acabó la protagonista de la coplilla sus días, en 1894.
            Tomás Bretón se hizo eco de la leyenda forjada por el pueblo y eligió su trama como argumento de su ópera “La Dolores”. Según Sánchez Portero, la meta del compositor salmantino era dar a España una prestigiosa ópera nacional y así comenzó a trabajar sobre “La Dolores”, primero en su casa de Astillero, en Santander, y después trasladándose hasta Aragón y, más en concreto, a Calatayud para oír las jotas antes antes de escribir la incluida en su obra.
                                                                                  Elena Fernández Pello

El Campoamor acoge una muestra
sobre el mito popular de la Dolores
            La Dolores mira a Oviedo desde el Campoamor. Una selección de documentos y fotografías de la famosa vecina de Calatayud acompaña a la zarzuela compuesta por Tomás Bretón que se representa en el teatro hoy y mañana, como últimos días. La labor de rastreo de Antonio Sánchez Portero desde hace 20 años ha logrado reunir más de tres mil papeles en los que está escrita la vida de Dolores Peinador. “Una leyenda universal no surge de la nada. Veamos qué ha concurrido en esta mujer para convertirse en lo que es”, fue la frase de partida de su actividad. En su camino descubrió la belleza de Dolores, una herencia millonaria por la que pleiteó con su padre, un matrimonio en secreto y una ciudad de gran importancia que sirvió de altavoz. Ingredientes que configuraron la leyenda popular.
            La pequeña parte que ahora acoge el Campoamor es suficientemente significativa y ha recabado el interés de los que en ésta han puesto los ojos. Su partida de nacimiento, una fotografía de la casa natal o actas de juzgado dan fe de una vida apasionante que se muestra sesgada pero elocuente.
                                                                                                          Alberto Zapico






ROTUNDO TRIUNFO
DE “LA DOLORES” EN OVIEDO

            Todavía estoy emocionado —y me durará mucho— por la magnífica acogida que el entendido público de Oviedo ha dispensado a la ópera “La Dolores”, de Bretón. Con ella se cerraba con especial brillantez el “IX Festival de Teatro Lírico Español de Asturias”, que comenzó el 19 de marzo con la zarzuela “La leyenda del beso”, continuó con la zarzuela “El juramento” y con el ensayo de tonadillas “Tres enredos de amor”, y culminó apoteósicamente con “La Dolores”, representada los días 30 y 31 de mayo y 1 y 2 de junio.
            Daba gozo contemplar el fastuoso —el regio, y nunca mejor dicho— marco del Teatro Campoamor, completamente abarrotado por un público que seguía con fervor las representaciones. Se agotaron todos los días las localidades. Para ser más exactos, en el último día, se quedaron vacíos unos pocos asientos del gallinero.
            Y esto es muy importante, porque no se debe olvidar que este teatro está considerado como una catedral de la ópera, siguiendo la estela del Liceo de la Ciudad Condal y superando al Teatro Real de Madrid, que todavía no ha cogido la onda tras su prolongado cierre.
            Debido a la dificultad de la obra, de gran exigencia vocal para todos sus intérpretes, fue conveniente contar con dos repartos. En líneas generales estuvieron todos los cantantes muy acertados, pero destacaron la soprano Teresa Novoa, que cada vez se supera y está consiguiendo una Dolores ideal; Javier Palacios, como Lázaro; Silvia Leivinson, Gaspara; Rodrigo Esteve y Federico Gallar, en el papel de Melchor; Marco Moncloa, como Patricio; y Francisco J. Sánchez, representando a Celemín.
            Ya no sé cuántas veces he visto esta obra; pero nunca me canso y me sabe a gloria y a nueva y, si se me permite, la tomo como un premio a muchos años de trabajo. ¡Qué pena que no podamos disfrutar de este maravilloso espectáculo en Zaragoza! Algo habrá que hacer. Pero es imprescindible la colaboración de entidades públicas y de patrocinadores. Lo que en principio no parece muy difícil. Pues unas, además de cumplir con su obligación, y otros, como inversión, tienen garantizados el prestigio y la publicidad.
            Todos los actuantes estuvieron a un gran nivel, lo mismo la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Oviedo y el coro de la Capilla Polifónica de esta misma ciudad, dirigidas por Tulio Gagliardo; que la Rondalla Lírica de Madrid; o los bailadores del Grupo Folklórico “Solera de Aragón”, dirigido por Mariano Arregui, que entusiasmaron especialmente a los ovetenses bordando los vibrantes pasos de la sin igual Jota de la Dolores, al final del primer acto, en la plaza del Mercado de Calatayud, reproducida fielmente por Julian Molina, quien también es el director de escena.
            Mención especial se merece el director de producción, Francisco Alonso Resalt, al que, por muchos motivos, se le puede considerar bilbilitano de pro. Sin su concurso, no hubiese sido posible que nuestra Dolores haya sido la mejor embajadora de Calatayud en Jerez, en Santander, en Málaga y ahora en Oviedo.

                                                                                  Antonio Sánchez Portero